MANOLO CASCALES
LA PERSONALIDAD DE MANOLO CASCALES
2 de agosto de 1953 Curro Fetén para “Toros y Deportes”
Los aficionados que llenaban hasta la bandera la Plaza de Las Arenas en este primer domingo de agosto no daban crédito a lo que estaban viendo. Parecía imposible que se torease como lo estaba haciendo este muchacho de figura elegante y andares reposados. Con esa sobriedad, con esa tranquilidad arrebatadora y con esa manera asombrosa de bajar las manos, se había ganado la admiración del respetable.
Torero de gran personalidad, desde los primeros lances de capa con que recibió a su primero, se había adueñado de las voluntades. Y es que cuando se torea como él lo hace, con esa impavidez de escalofrío, las gentes irrumpen en exclamaciones entusiastas. Como una columna en medio de la plaza, se mantenía hierático, sin darle la menor importancia a que las afiladas cuernas de sus enemigos pasaran una y otra vez rozándole los machos. Columna de oro porque de varios quilates eran sus lances y muletazos. Qué verónicas y qué quite por gaoneras. Hasta al propio Gaona se le hubiera caído la baba.
Buenos, muy buenos fueron los estatuarios con que dio comienzo a su labor con la roja franela, pero mejores fueron los muletazos que a continuación ejecutó con la pañosa en sobre la izquierda. No se puede bajar más la mano y ejercer un mando más perfecto sobre las reses. Sus naturales son sobrenaturales por el dominio y temple que sabe imprimirles. La mano derechoa también ha tomado parte en esta sinfonía. Abaniqueos por la cara, trincherazos y pases de pecho de pitón a rabo en los que parece que el toro sale de las entrañas de la tierra. La mala colocación de la espada le ha privado en ambos toros de cortar la oreja, pero eso es cosa que tiene importancia relativa, pues si hoy no ha tenido suerte con ella, otro día la tendrá. Hubo vuelta al ruedo y saludos de lo más versallescos. Su nombre? MANOLO CASCALES.
RAMON SOLANO ha estado muy bien en sus dos toros. Su primero no se prestaba mucho al lucimiento y el muchacho estuvo bien por lo que fue fuertemente ovacionado. Y en su segundo volvió a lograr un éxito de clamor. Lanceó con estilo y arrojo y con la muleta realizó una faena repleta de perfecciones. Naturales largos y mandones, reposados y con mucho temple. Derechazos en redondo inacabables y toda la gama del toreo brotó de su muleta como por generación espontánea. Hay un gran torero y un superior muletero. Banderilleó a sus dos toros con buen estilo y con el acero estuvo bien en su primero y colosal en el lidiado en quinto lugar, al que despacho don un gran volapié hasta la mano. Mucho puede este muchacho y como también tiene valor como para terminar con la guerra de Corea tenemos torero para rato. Cortó las dos orejas a su segundo y dio triunfal vuelta al ruedo. RAMON SOLANO, un futuro y gran matador de toros.
Sobre la mansedumbre y contraestilo de su lote PEPE ORDÓÑEZ, torero por los cuatro costados, ha tenido un gesto de torero pundonoroso. Herido de consideración en un muslo, sin hacer aspavientos de ninguna clase y sin teatro, ha dado muerte a su segundo toro en condiciones de inferioridad bien manifiesta, condiciones que no ha tenido en cuenta la presidencia al enviarle un recado, totalmente fuera de lugar. No ha tenido hoy suerte Pepe Ordóñez con toros que no le permitían hacer su toreo tan rico en bellos matices y por ende la cornada y el aviso. No obstante dio pruebas categóricas de su arte en todo momento, especialmente al lancear a la verónica.
Fue prólogo de la novillada la actuación del gran rejoneador D. ÁNGEL PERALTA, el cual, como quiera que hirió de muerte al novillo de La calle al prender el segundo rejón, solicitó permiso para lidiar a caballo otro toro, regalo suyo y de la empresa, al finalizar la lidia ordinaria, permiso que le fue concedido entre el contento general. En todo momento hizo alarde de su buena doma y de su perfecto dominio del arte del rejoneo, siendo escoltada su meritoria labor por los aplausos del respetable, llegando a la cumbre del entusiasmo cuando clavó banderillas a dos manos en medio de atronadoras salvas de aplausos. Otro gran éxito a sumar entre los muchos conseguidos por el rejoneador sevillano, gran caballista y poseedor de un valor a toda prueba. Tiene en su haber el resucitar en Barcelona la pasión por el toreo a caballo.
Se corrieron cinco novillos de Da. M. Teresa Oliveira que dieron buen juego, sobresaliendo el lidiado en quinto lugar y uno de Clairac, corrido el séptimo, bronco. El novillo de La Calle fue bueno, pero como ya dijimos no dio ocasión al lucimiento. El de Quintela que salió en último lugar, manso.