Madrid Novillada extraordinaria 23-6-66

Pisando un terreno de angustia, remata las suertes con un dominio y un juego admirable de cintura y muñeca muy difícil de conjugar… 

 

6 Novillos de D. Baltasar Iban

“Riverita”
Pedrín Benjumea
Paco Ceballos
 

OREJA PARA PEDRÍN BENJUMEA Y PACO CEBALLOS. EL DE C´RODOBA DIO ADEMAS TRES TRIUNFALES VUELTAS. AMBOS ESPADAS SALIERON EN TRIUNFO.

Comentario a la novillada extraordinaria celebrada esta tarde en Málaga, según la manera de ver de Curro Fetén, servidor de ustedes.

     Por la mañana se desechó un novillo de los seis anunciados de la prestigiosa vacada de Don Baltasar Iban Valdés y en su lugar se lidió uno, que se corrió en cuarto lugar, de Cortijo Oliva, que dio mal juego. Don Baltasar Iban bien puede estar  satisfecha del juego que han dado sus cinco novillos, pues todos tuvieron bondad y casta y no ofrecieron dificultades de mención para los espadas alternantes. Incluso hubo uno, el primero de la tarde, que fue merecedor de la vuelta al ruedo como premio a su bravura y nobleza. Bonitos de lámina, encastados y con kilos, se ganaron las justas ovaciones del respetable. Enhorabuena al ganadero.

     Riverita fue ovacionado al saludar al primero de la tarde, con unas verónicas de clásico trazado, así como al llevar al caballo a su enemigo en unas chicuelinas galleadas muy vistosas. Su labor muletera fue variada y artística, con detalles de gran torero al correr superiormente la mano en derechazos y naturales a los que ponía el adecuado remate con pectorales de pitón a rabo. Hasta cambió a su enemigo con la muleta plegada en la izquierda haciendo alarde de dominio y maestría. La faena fue del agrado de la concurrencia que le aclamó delirantemente. Mató de una gran estocada y hubo petición de oreja para el de Barbate, que se limitó a saludar desde el tercio. Ya hemos dicho que el de Cortijo Oliva fue mansurrón, tenía peligro y embestía a oleadas. Riverita se mostró con él breve y aseado y cuando lo finiquitó de estocada, pinchazo, estocada y descabello, le volvieron a ovacionar por lo bien que había quitado del medio al regalito. Con el capote en quites estuvo lucidísimo toda la tarde.

     El Gran Capitán de la novillería andante es Pedrín Benjumea. Pero, apresurémonos a aclarar que cuando hemos dicho andante no es que el diestro de Palma del Río no se quede quieto. Nada más lejos de la realidad. Está con un valor, con un sitio y con un sentido torero de asombro. Y es que este Pedrín Benjumea torea en un palmo de terreno, se arrima como ninguno y además remata los lances y muletazos a la perfección. Es torero de alboroto triunfal, pero al mismo tiempo con un sentido que asombra. Véanse si no sus lances a la verónica, su quite por delantal de manos bajísimas y ese lidiar, ese llevar al caballo a sus enemigos por delante que le han valido grandes ovaciones. Tiene valor, corazón y una cabeza que rige y que manda. Pisando un terreno de angustia, remata las suertes con un dominio y un juego admirable de cintura y muñeca muy difícil de conjugar. Torea en el sitio de los tremendistas, con valor de secar gargantas pero con una soltura y un mando absoluto, siempre atento, seguro y sereno a todos los incidentes de la lidia. Con la muleta, sus dos faenas las inició rodilla en tierra. La primera, cerrado en tablas y la segunda en los medios formando la mundial. No caben mayores apreturas, mayor reposo ni más tranquilidad. Con suave toque de muleta, con perfecto giro de muñeca se sacaba al toro de encima sin brusquedades, naturalmente, tras pasárselo una y otra vez por la faja. Mató a su primero de una gran estocada y se le otorgó una oreja mostrada en aclamada vuelta a la candente. En el quinto, en el que logró una estocada al segundo envite, no le quiso otorgar la presidencia el trofeo, pese a la mayoritaria petición del mismo y hubo de dar hasta tres aclamadas vueltas al ruedo, recogiendo la admiración de toda la plaza.

     Debutaba el novillero malagueño Paco Ceballos que ha alcanzado un éxito indiscutible. A sus dos enemigos los ha toreado superiormente con el capote. Lances suaves de manos bajas y temple que se han jaleado con estruendo y que han sido como su tarjeta de visita. Asperillo llegó su primero a la muleta y después el malagueño hubo de luchar contra el viento. No obstante el muchacho, que tiene buen corte torero, dejó entrever lo que vendría después y toreó con clásico acento sobre ambas manos ovacionándose toda su labor. Mató de estocada con salida indiscreta, otra entera y descabello a la cuarta, dando lugar a que sonase un aviso, aunque como había mostrado muy buenas maneras, se le ovacionó con saludos. Pero donde el malagueño formó la que formó fue en el que cerró plaza, al que toreó superiormente a la verónica. Su labor muletera, basada en el más depurado y clásico toreo, muleta y corazón por delante y adelantar la pierna contraria en el momento del embroque, fue seguida con creciente interés por la concurrencia que había advertido que en este Paco Ceballos hay una figura muy prometedora, todo un matador de clásico estilo. Sus derechazos fueron enormes de aguante y mando y sus naturales, sencillamente portentosos. Mató de una gran estocada y se le otorgó una oreja paseada en hombros por el ruedo.

     Y nada más, hasta mañana a esta misma hora, Curro Fetén, servidor les desea muy buenas noches.-