GRANADA 16 a 19 -6-65

"Las  grandes verdades del toreo, la grandiosidad del lance fundamental de la verónica, la suprema sencillez del natural, la suma belleza del pase en redondo y la arrogante gallardía de los pases de pecho."

 

Día 16 de Junio de 1965

    6 Toros de Manuel Arranz
    - Paco Camino
    - El Cordobés
    - Zurito

CUATRO OREJAS Y RABO PARA ZURITO QUE SALE A HOMBROS. DOS OREJAS PARA EL CORDOBÉS. José Garrido, banderillero de El Cordobés, gravemente herido. Paco Camino, que realizó una gran faena, resultó lesionado.

Comentario a la corrida de toros celebrada esta tarde en Granada, según la manera de ver de Curro Fetén, servidor de ustedes.-

     Una brava y encastada corrida de Arranz que si acaso ha pecado de algo, ha sido de tener genio. El peor toro ha sido sin duda alguna, el corrido en cuarto lugar, que ha acusado mucho más sentido y peligrosidad.

     Y con el primero de los toros del famoso criador salmantino Paco Camino ha estado sublime al torear con el capote y muleta. La desbordante inspiración de su fantasía creadora nos ha deleitado con un toreo a la verónica pleno de armonía y ritmo y en un quite por chicuelinas de las suyas, ha puesto la plaza abajo. Con la muleta ha escrito otra bella página del toreo. Una faena que serviría como molde cuando se quiera hablar de lo que es y debe ser el toreo.  Y es que el torero de Camas ha toreado con un regusto asombroso. Derechazos de largo trazado y naturales de eterna ejecución han sido la base y el fundamento sobre los que ha montado su labor torera. Pero esta sinfonía se ha quebrado a la hora de contabilizar trofeos pues Paco, por cortarle el viaje a su enemigo, por esperarle y no dejarle meter el brazo, ha pinchado en tres ocasiones antes de lograr la media que ha hecho rodar a su enemigo y el premio ha quedado reducido a una gran ovación. El cuarto le cogió en los primeros capotazos de saludo y se lo cambió de uno a otro astifino pitón. Lo recogió en el suelo y le tiró unos hachazos de muerte. Por fortuna el torero se salvó de milagro, nació de nuevo y cuando se incorporó maltrecho, vimos como en ambas piernas, en los muslos, le faltaban pedazos de la taleguilla. Fueron unos momentos dramáticos en los que el toro, con sus pavorosos pitones corneaba al diestro en el suelo. Por fortuna, como queda dicho, no ocurrió la tragedia porque Dios estaba al quite y la cuadrilla y Bojilla, que estaba de espectador, acudió prestamente. El toro llegó al trance final con acusado sentido y Paco, visiblemente en inferioridad, le realizó una faena de aliño y lo mató después de varias entradas, en tanto que respirábamos todos.

     El Cordobés ha formado en sus dos toros ese escándalo multitudinario que siempre le acompaña. A su primero, un toro con acusado genio, le realizó una valerosa y artística labor muletera en la que se pasó a su enemigo muy apretadamente  en pases sobre ambas manos muy logrados que pusieron la música en marcha. Fue una faena muy vibrante y emotiva en la que el de Palma del Río expuso lo indecible hasta llegar a entusiasmar al respetable. Pero dos pinchazos, media y descabello le dejaron sin trofeos. No bien hubo saltado a la arena el quinto de la tarde, El Cordobés se apretó en unas verónicas torerísimas. La faena la inició con sus personales pases del desprecio, en tanto iba ganando terreno a su enemigo hasta llevarlo a los medios, donde le realizó una completísima labor muletera en la que desde los derechazos en círculo a los naturales, pases de pecho y demás desplantes y muletazos de su repertorio, hicieron  enronquecer a las gentes. Mató de pinchazo y media estocada con refrendo de descabello y se le otorgaron las dos orejas, dando aclamada vuelta al ruedo. En el segundo toro de la tarde Pepín Garrido, al intentar sacar una espada salió perseguido por el toro que le infligió una grave cornada en la región glútea. Le deseamos una rápida mejoría.

     Y esta corrida granadina sirve para que Zurito, cual ave fénix, renazca con bríos inusitados y afán de triunfo incontenible. Y el joven matador de toros cordobés hace que el público se le entregue por completo por una actuación pletórica de aciertos. Una actuación sin un fallo si una duda, sin un pero que oponer a todo cuanto ha ejecutado. Y el balance de ella no puede ser más elocuente: cuatro orejas y un rabo y triunfal paseo en hombros de la multitud entusiasmada. Tenía que ser así tarde o temprano. Gabriel ha encontrado el sitio que la grave cornada de Jaén el pasado domingo de Resurrección le había quitado. Y volvió a ser el torero animoso y valiente, todo hombría, pundonor y arte que tantas veces hemos cantado. Con el capote toreó superiormente a la verónica y por chicuelinas. Con la muleta la sobriedad de un excelente quehacer torero convenció a todos. Y como con la espada estuvo hecho un gran matador, a nadie debe de extrañas lo clamoroso de su éxito. Zurito está de nuevo en plan de batalla.

     Y nada más, hasta mañana a esta misma hora, Curro Fetén, servidor, les desea muy buenas noches. 

 Día 18 de Junio de 1965

    6 Toros de Germán Gervás
    - Curro Romero
    - El Cordobés
    - Manuel Cano El Pireo

MEMORABLE TARDE DE TOROS. CUATRO OREJAS Y DOS RABOS PARA EL CORDOBÉS Y TRES Y RABO PARA MANUEL CANO “EL PIREO” QUE SALE EN HOMBROS.

Comentario a la corrida de toros celebrada esta tarde en Granada, según la manera de ver de Curro Fetén, servidor de ustedes.-

     Tarde histórica en los anales del coso granadino. Dos toreros de Córdoba, Manuel Benítez y Manuel Cano El Pireo, han dado una grandiosa tarde de toros. El encierro de don Germán Gervás ha dado buen juego en general para los caballos y no han ofrecido dificultades de monta para los toreros de a pié, salvo el corrido en cuarto lugar, que llegó a la muleta quedándose corto, aplomado y embistiendo con la cara alta.

     Y con los toros mas deslucidos del encierro ha luchado el fino estilo, la clase incuestionable de Curro Romero, que ha toreado cuando sus enemigos lo han permitido, como las propias rosas. Con el capote principalmente, el duende gitano de Curro Romero  ha bordado verónicas de clásico compás en las que ha llevado superiormente toreado a su enemigo, dando a la suerte prestancia y hondura. Después con la muleta en su primero, un toro tardo, ha sacado algunos pases de los de su marca que se han jaleado, pero el toro se ha negado a colaborar y el artista, que ha tenido que tirar por la calle de enmedio y finiquitar a su enemigo de una corta, dando la vuelta al ruedo con algunos votos en contra. Con el cuarto de marras ha estado, como queda dicho, muy torero con el capote, pero a la muleta su enemigo ha llegado sin dar ninguna clase de facilidades, por lo que ha decidido abreviar, lo cual ha enfadado a las gentes cuando Curro ha matado de media y un certero descabello.

     Cuatro orejas y dos rabos ha cortado El Cordobés en esta tarde de auténtico clamor. Su valor enorme, su personalidad única, han puesto a las gentes en pié y han hecho que la plaza entera fuese un auténtico volcán de incesantes ovaciones. Y es que Manolo se ha arrimado de firme y ha tenido una actuación pletórica de aciertos, lo mismo al manejar el capote en sus lances peculiares, que al quitar por apretadas chicuelinas. Y con la muleta, dos faenas electrizantes, en las que la emoción del público no ha tenido ni un momento de reposo. Faenas en las que el personal estilo de hacer y concebir el toreo por Manuel Benítez, ha hecho que la plaza entera vibrase de entusiasmo. Ambas manos se han movido con soltura, aplomo y excelentes formas y los muletazos, increíbles muchos de ellos, han producido un alboroto en los tendidos. Una estocada con refrendo de descabello, precisó para mandar al desolladero a sus dos enemigos y como queda dicho, se le otorgaron las dos orejas y el rabo de cada uno de ellos, teniendo que recorrer el ruedo en triunfo y saliendo al final del festejo de igual forma de la plaza.

     Y El Pireo, nuevo y arrollador valor de la cantera torera cordobesa, el nuevo fenómeno de la tierra del Guerrita, ha estado en sus dos enemigos hecho un gran torero. Con el capote se ha ganado enormes ovaciones, pues su manera de lancear ha llegado hondamente a los aficionados. Al que cerró plaza, lo toreó por verónicas de forma insuperable y le realizó un apretado y torero quite por gaoneras que pusieron al público en pié. Tres orejas y rabo ha sido el premio total a su triunfal actuación, pero bien pudo haber contabilizado más trofeos si llega a tener mayor fortuna con el acero en su primero, al que mató de dos entradas y certero golpe de cruceta. Pero por encima del interés que puede tener el corte de trofeos para un nuevo matador de toros, el arte, la clase y el señorial empaque del joven doctor en tauromaquia, ha quedado de manifiesto a lo largo de dos faenas enormes de fondo y forma. Dos trasteos muleteriles en los que el muchacho de las Margaritas ha toreado de forma insuperable sobre ambas manos, dando a los muletazos todos una hondura y un temple asombrosos. Y cuando un torero torea con esa elegante prestancia cuando lleva a los toros toreados como los lleva El Pireo, bien podemos decir que se trata de una auténtica figura de la fiesta. Al que cerró plaza lo mató de media lagartijera que hizo innecesaria la puntilla y aquello fue la locura. Una oreja en su primero y dos y rabo en el que puso fin a la brillante jornada y la triunfal salida en hombros. El Pireo, ha cuajado en auténtica figura del toreo. Córdoba y su afición deben sentirse orgullosos.

     Y por hoy nada más, hasta mañana a esta misma hora, Curro Fetén, servidor, les desea muy buenas noches.-

Día 19 de Junio de 1965

    6 Toros de Hermanos Cembrano
    - Curro Girón
    - Jaime Ostos
    - Paco Camino

OREJA PARA CURRO GIRÓN Y JAIME OSTOS

Comentario a la corrida de toros celebrada esta tarde en Granada, según la manera de ver de Curro Fetén, servidor de ustedes.-

De la corrida enviada por los prestigiosos ganaderos Hermanos Cembrano, fue desechado en el apartado uno de los toros y en su lugar se corrió uno de don Manuel Arranz, que dio buen juego para los montados y para las gentes de a pié. Los de Cerroalto en conjunto dieron un deslucido juego, no añadiendo laureles a la famosa divisa.

     Curro Girón ha estado animoso y valiente en su primero al que toreó muy bien con el capote en verónicas  de lograda ejecución y que se acogieron con oles. Llegó el de Cerroalto al trance final aplomado, pero el venezolano a fuerza de porfiarle realizó una variada y valerosa faena con pases sobre ambas manos que merecieron los honores de la música y las ovaciones del respetable. Tres pinchazos antes de agarrar la estocada dejaron el premio en una ovación que recibió desde el tercio. Al cuarto lo toreó entre oles con el capote y tras prender tres excelentes pares de banderillas, realizó una faena iniciada con unos muletazos sentado en el estribo y proseguida entre jalear continuo y acompañamiento de pasodoble torero, por derechazos, naturales, de pecho y otros de adornos que entusiasmaron. Mató de una entera y paseó por el ruedo la oreja de su enemigo entre ovaciones constantes.

     Jaime Ostos estuvo superior con el capote en su primero, tributándosele por ello una enorme ovación. A la muleta llegó el toro con cierta aspereza, pese a lo cual Jaime le cuajó un valeroso trasteo, en el que jugó la mano diestra de forma intachable. Al dar un natural, resultó cogido y suspendido por la ingle izquierda salvándose de un percance de milagro. Sin mirarse siquiera, siguió artista, torero y valiente. Mató de tres pinchazos y estocada y por ahí se le fue el premio que ya tenía ganado por la faena. Al quinto, de Arranz, le toreó colosalmente por verónicas y chicuelinas que pusieron la plaza en pié. Con la franela llevó a efecto una gran labor, pues Jaime toreó de forma extraordinaria por derechazos, naturales y de pecho. Muletazos, todos, en los que llevó superiormente toreado a su enemigo y en los que templó de maravilla. Mató de una estocada y tres golpes de cruceta y se le otorgó, a petición unánime del público, la oreja con la que paseó en triunfo por el ruedo.

     Paco Camino ha sido el menos afortunado con el lote sorteado. Su primero es un toro mansón que sale suelto del caballo y llega a la muleta mostrándose quedo y sin codicia. El de Camas porfía valerosamente con él y por fueros de auténtica torería le cuaja una docena de pases naturales en los que llevando al toro embarcado de forma magistral, consuma la suerte fundamental de forma magnífica entre el alborozado contento de los aficionados entregados al arte de Paco Camino. Después el toro dice que nones y no embiste más y Paco recurre a un valeroso e inteligente macheteo que es admirado y reconocido por el público en todo su valor y justo mérito y las ovaciones suenan fuerte. Mata de una gran estocada y hay petición, pero el diestro se limita a saludar desde el tercio. El que cierra plaza es un toro de media arrancada cuando embiste, que las más de las veces está a la defensiva y con él no cabe hacer otra cosa que estar breve y aseado y esto es lo que lleva a cabo el diestro que despacha a su deslucido enemigo de estocada y descabello, escuchando muestras de desagrado y palmas de los que supieron ver la realidad que en sí llevaba la res.

     Y nada más, hasta mañana a esta misma hora, Curro Fetén, servidor, les desea muy buenas noches a todos.